Can-Can

Sinopsis

Puesta en 1960 y basada en el musical de Broadway con música de Cole Porter, Can-Can es una comedia musical protagonizada por Frank Sinatra, Shirley MacLaine y Maurice Chevalier. La historia se ambienta en el París de principios del siglo XX y gira en torno al famoso baile can-can, que se convierte en el centro de una disputa moral y legal cuando ciertos personajes tratan de prohibir los espectáculos en un cabaret. Sinatra interpreta a un abogado elegante y carismático implicado en la defensa de la vida nocturna parisina, mientras que MacLaine da vida a una bailarina apasionada por su arte. La película combina números musicales vistosos, coreografías y elaborados decorados con un tono a menudo ligero y romántico, aunque también muestra tensiones entre la tradición y la modernidad. Can-Can destaca por su espléndida dirección artística y por las interpretaciones de su reparto principal, ofreciendo entretenimiento clásico de la era dorada del musical cinematográfico.

Elenco

• 

  Frank Sinatra

  François Durnais

• 

  Shirley MacLaine

  Simone Pistache

• 

  Maurice Chevalier

  Paul Barriere

• 

  Louis Jourdan

  Philipe Forrestier

• 

  Juliet Prowse

  Claudine

• 

  Marcel Dalio

  André

Reseñas

Can-Can recibió críticas mixtas en su momento y, con el paso de los años, suele ser valorada como un producto atractivo para quienes disfrutan de los musicales clásicos, aunque no figura entre los más celebrados del género. En general, la crítica elogió las actuaciones y la producción: Maurice Chevalier fue apreciado por su encanto veterano y Shirley MacLaine por su energía en el baile; Frank Sinatra aporta carisma y presencia aunque algunos críticos han estimado que su participación no explota por completo su potencial como cantante-actor en este filme. Las secuencias musicales y el vestuario suelen destacarse como puntos fuertes, con números vistosos que reflejan la opulencia visual típica de los musicales de Hollywood de la época.

Sin embargo, muchas críticas señalaron problemas de ritmo y una adaptación desigual del material teatral al formato cinematográfico. Algunos reseñistas consideraron que la dirección no siempre logra equilibrar el tono cómico con las subtramas románticas y legales, y criticaron que la película sacrifica profundidad narrativa por el espectáculo visual. Las valoraciones modernas la sitúan como una obra menor dentro del legado de sus protagonistas pero disfrutable para aficionados del género.

En cuanto a puntuaciones, la película aparece en IMDb con una calificación de 6.3/10 (según usuarios). La recepción en plataformas críticas tradicionales es mixto: ciertos medios contemporáneos destacaron el atractivo estético y el elenco, mientras que otros señalaron falta de coherencia y fuerza dramática. En resumen, Can-Can es recomendable para quienes buscan nostalgia y números musicales llamativos; quienes esperen una adaptación teatral totalmente lograda o un musical con mayor profundidad argumental podrían quedarse con sentimientos encontrados.